Rescatada en el 2016, en Cartago, su historia es como la de muchas mamas en las calles, se llevaron a sus crías y los vecinos amenazaban con envenenarla ya que trataba de morder lo que es normal en perras con cachorros.

Se le calcularon 3 años en el 2016, tenía alergia sobre todo en su lomo, muchas pulgas y parásitos, después de que se trató la piel no ha tenido problemas de salud, el primer año costo que se adaptara ya que el temor a ser lastimados los hace inestables, con los años se ha vuelto más tranquila y no da problemas.

Es una perra invisible para la mayoría de los que nos visitan, ser de color obscuro y adulta no es lo que buscan las familias, sabemos que todos los perros necesitan una familia propia, hemos sido su casa por mucho tiempo, es hora de encontrar un hogar para siempre.